Las personas participantes se han sorprendido de la calidad del río y han podido ser partícipes en un proyecto de ciencia ciudadana gracias al apoyo brindado por un manual de monitoreo del río Nalón diseñado por Ecoherencia
Candamo, 29 de noviembre de 2023. Ecoherencia ha organizado, dentro del Programa de Voluntariado en Ríos de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico, una serie de actividades de ciencia ciudadana en el río Nalón.
333 personas han llevado a cabo diferentes acciones para determinar la calidad de las aguas del río Nalón desde su nacimiento y hasta su desembocadura. Se han realizado 8 salidas durante el mes de octubre con diferentes colectivos: centros escolares, centros de atención a personas con discapacidad, familias y público en general en diferentes puntos accesibles del río Nalón.
En 6 ocasiones se ha llevado a cabo, apoyados en un manual de monitoreo realizado gracias al propio proyecto, la observación directa de la presencia de las especies emblemáticas de flora y fauna (autóctonas y alóctonas) del río Nalón, así como el análisis de diferentes factores físico-químicos como la turbidez, el pH o la concentración de nitratos. Además, se ha realizado una evaluación de la calidad de la vegetación de ribera en función de su continuidad longitudinal, conexión con la vegetación colindante y estructura y complejidad. El índice de naturalidad se obtuvo observando y determinando la presencia o ausencia de modificaciones en el cauce del río, infraestructuras o basuras.
También se realizó el análisis de la calidad del agua observando los macroinvertebrados presentes en el río, como odonatos, moluscos o dípteros entre otros.
En todas las acciones realizadas se recogieron las basuras y residuos presentes en los tramos analizados y recorridos. En total se recogieron 178 kg que fueron separados y depositados en sus contenedores correspondientes para su posterior reciclado y/o gestión.
El Nalón es un río, que pese a su tamaño, importancia y uso histórico, es muy desconocido para las personas que residen en su entorno. De hecho, ha sido interesante ver cómo las personas se sorprendían de la alta calidad de las aguas ya que tienen un mal concepto del río y por ello no es valorado positivamente. Los resultados de la calidad de sus aguas han sido buenos, aunque se ha detectado la necesidad de recuperar la estructura de la vegetación de ribera, así como sus especies autóctonas (eliminando exóticas entre otras medidas).
Es necesario acercar el río a las personas y las personas al río para asegurar su conservación y su restauración. El estado actual del río y de sus áreas recreativas o zonas de baño nos hacen pensar que es necesario mucha más educación en el cuidado de los espacios naturales y su biodiversidad.
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